Madrugar la miseria. Con la obra “Mañanas y madrugadas”, el grupo Extras cumple 25 años, en el clásico salón de la Cripta. Realizar esta puesta sobre una creación colectiva les cambió el modo de trabajo a los integrantes del grupo Extras y significó un doble desafío. Beatriz Molinari. El grupo de teatro Extras cumple 25 años. En un tiempo en que los grupos volvían a apostar a la autogestión, confluyó el empuje del profesor Terence Wyatt, los padres de la Escuela Mantovani y el espíritu inquieto de Quito Mariani que les abrió la puerta de la Cripta, en Villa Belgrano. Aún hoy ensayan y estrenan en ese lugar donde desarrollaron el amor incondicional al oficio del actor. Lucía Pihen dirige Extras desde hace cinco años. Juntos crearon Mañanas y madrugadas, trabajo colectivo sobre personajes que se la rebuscan. “Para el grupo fue un desafío la creación colectiva porque siempre hicieron textos de autor. Proponer esta metodología fue un reto para ellos y para mí”, comenta Lucía. La ide